Consejos para llamar a putas y que no nos pueda la vergüenza
Pagar por follar puede ser un buen recurso cuando no podemos tener sexo de otra manera. No hay nada de malo en ello (aunque si bien es cierto que la prostitución está cada vez más perseguida). El hombre, y la mujer, tienen necesidades biológicas que una simple mano no va a poder solucionar para siempre; aunque la masturbación está bien, el hecho de sentir cuerpo con cuerpo a otra persona es algo magnífico.
Si quieres llamar a putas, pero no te atreves a hacerlo porque te da corte, nosotros te vamos a dar algunos consejos que te ayudarán a vencer ese miedo.
Tips para llamar a putas
Lo primero en lo que tienes que pensar es en que estas profesionales han estado con toda una serie de hombres; se han enfrentado a las peticiones más insólitas, hasta algunas muy sencillas. Es por ello, por lo que ni se van a escandalizar, ni te van a juzgar, ni seguramente te vayan a poner ninguna pega en tu petición.
De la misma manera que cuanto vas a comprar al supermercado, o a contratar algún servicio, en este caso tu eres el cliente, y tu decides que es lo que estás buscando. Con esto no te queremos decir que puedas tratarlas malamente ni mucho menos, pero si que tienes que saber que al llamar a putas tú pagas y tu mandas. Podrás pedirles que te hagan el tipo de servicio que siempre has querido: por ejemplo, te la podrán mamar en el coche, te la podrás llevar al apartamento para que den rienda suelta a tu imaginación, incluso hasta puedes contratar a escorts de lujo para que te acompañen con tus viajes.
Cómo cualquier experiencia en esta vida, lo que más nos va a costar va a ser la primera vez; te aseguramos que si te decidas a llamar a putas una segunda vez, esta va a ser más fácil, y así de forma sucesiva.
Tan sólo relájate, memoriza bien a la mujer que tiene delante ve a follártela.